

PINTURA
Los pueblos que no han tenido una historia escrita y que se resisten a introducir cambios en sus vidas, a diferencia de aquellos que han evolucionado y han estado en una constante inquietud, con cambios diacrónicos (al decir de Ferdinand de Saussure), constituyen las sociedades “frías” y las “cálidas”. López Prado así trabaja, con zonas en las que el tiempo parece estar detenido y las costumbres no cambian, con improntas visuales de su Aguililla natal, de la zona de la tierra caliente y con los materiales de antaño-utiliza tierras añadidas a sus acrílicos y óleos,-, con la presencia de tonos y colores propios de la vida natural, manifestando que esta nutrido de esas memorias colectivas e individuales no desprovistas de sueños y mitos.
GRACIELA KARTOFEL
























